A partir del próximo mes, comenzará una nueva etapa para los refugios localizados en los sectores Italiano, Pasos y Torres, y el campamento Laguna Azul, en el Parque Nacional Torres del Paine. La razón: la Corporación Nacional Forestal (Conaf) resolvió que en dicho mes -y a más tardar durante la primera quincena de agosto-, se levantará una licitación para que estos lugares sean concesionados a privados.
Ayer en conversación con La Prensa Austral, la directora regional de la entidad, María Elisabeth Muñoz González, planteó que el propósito es procurar que los guardaparques que se desempeñan en estos sectores, se aboquen netamente a labores de conservación y no a aquellas de índole turístico, que en nada se relacionan con el quehacer asignado. “La misión de Conaf es la conservación de los ecosistemas y en este caso particular, del Parque Nacional Torres del Paine. Estos tres campamentos de montaña, aún están a cargo nuestro y por lo tanto, no cobramos a la gente que llega hasta ahí, que en número oscila entre las 50 y 100 personas diarias, quienes pueden pernoctar en cada uno de ellos. Entonces debido al importante aumento de visitantes de un año a otro, a esta unidad de Area Silvestre Protegida, queremos que nuestros guardaparques y brigadistas estén cada vez más abocados a la protección del parque”.
Privados al interior del Parque
Al quedar estos refugios particulares a cargo de los servicios turísticos que se presten en dichas áreas -incluyendo Laguna Azul-, se abrirán además oportunidades para que los privados innoven en dotar a estos campamentos, de áreas tales como la recreación. Todo ello, por cierto, deberá ir de la mano con los lineamientos y planes de manejo que desarrolla Conaf en todo el ecosistema que involucra a Torres del Paine.
Actualmente, los únicos campamentos base en concesión de privados son el refugio Paine Grande, Grey y Dickson, por lo que la inclusión de los anteriormente descritos, dará un nuevo aire a los circuitos de montaña y refugios administrados del Parque, que el año pasado recibieron unas 80 mil personas.
En paralelo a estas acciones, Conaf se mantiene en coordinación también con los privados de Estancia Cerro Paine -de 4.400 hectáreas-, única propiedad particular al interior del Parque Nacional Torres del Paine y que desde 1979 pertenece a la familia Kusanovic. “Ellos se rigen por una ley totalmente privada, sin embargo les interesa mucho participar de lo que significa ser un parque nacional, principalmente porque han ido derivando su área de negocios desde lo que fue una estancia, hacia el lado de turismo de intereses especiales. Eso es importante, porque los visitantes que vienen, quieren también un producto que tiene que ver con los estándares que provee el sistema de áreas silvestres protegidas de Chile, uno de los más valorados a nivel internacional, ya que es sostenible”.
Pago en línea y reserva
Conaf está trabajando además para contar en el Parque -antes de fin de año- con un registro de pago en línea y de reserva. “En eso estamos haciendo las coordinaciones, tanto con Fantástico Sur -el privado recién señalado- y la estancia propiamente tal, como con nuestros concesionarios que son Vértice y Grey. La idea es dejar en la retina de la gente, que al menos a partir de este año en montaña, no lleguen visitantes sin haber hecho antes una reserva. Lo ideal sería que previo a eso, el usuario pueda además comprar la entrada al parque para hacer los circuitos”.